Esta serie de diez fotografías nos muestra los paisajes de distintos lugares del Perú en los que se libraron importantes batallas o enfrentamientos armados que dieron forma a la historia del Perú. El formato panorámico de las imágenes resulta decisivo para dar cuenta de la amplitud y belleza del territorio, lo que contrasta, por un lado, con su carácter casi siempre desolado (o, al menos, marcado por la ausencia de personas) y con la falta de referencias, a excepción de los pies de foto, al conflicto que se desató en cada uno de estos lugares.

De este modo, con estos paisajes en cierto sentido mudos, Roberto Huarcaya nos ofrece una visión de la historia nacional que, paradójicamente, no está ahí: una historia de violencia que no vemos pero que sabemos que permea el territorio en el que vivimos, en palabras de Mario Montalbetti, “huellas de algo que se ha ido pero que sigue estando de otra manera”.

Es importante resaltar la elección de batallas que ha hecho Huarcaya. Están las emblemáticas de los libros de historia: las de la conquista española o las de las guerras de la Independencia o de la del Pacífico. Pero también están las de conflictos más recientes, como la del coche bomba puesto por Sendero Luminoso en la calle Tarata de Miraflores, o la de la matanza de periodistas en el poblado ayacuchano de Uchuraccay o la del enfrentamiento entre policías y pobladores en Bagua. Heridas recientes que aún no sanan del todo.

El cuestionamiento con el que nos confronta Huarcaya es profundo: nos presenta al país, a la nación, no como una comunidad al interior de la cual nos formamos y con la que nos identificamos, sino como un espacio de conflicto permanente y, entre esos conflictos, es necesario notar que los más cercanos en el tiempo están desprovistos de cualquier retórica heroica o fundacional que los libros de historia puedan adjudicar a los más antiguos. Como si nos dijera: miremos estos hermosos paisajes, recordemos lo que sucedió y que ya no vemos, pero nos ha marcado a todos. Y nos sigue marcando. Está en nosotros construir una historia futura sin campos de batalla.