La primera rebelde que conoció Anita fue su madre, Ana María Alvarado. Ella le enseñó a crecer con la mente abierta, a convivir con otras culturas y a hablar el francés desde muy pequeña.
Cuando Anita estudiaba periodismo en la Universidad Nacional de San Agustín, descubrió su primera experiencia audiovisual a través de los talleres de la Caravana Documental de Documental Independiente Peruano (DIP, ahora DOCUPERÚ). A partir de esta experiencia motivadora, fundó el colectivo Monopelao (2007) y dirigió algunos cortometrajes documentales.
En un inicio, se dedicó a la gestión cultural para promover el acceso al cine documental a través de muestras, talleres, laboratorios, conversatorios y estrenos. Esta práctica la llevó a conocer a personajes admirados del mundo del cine, como Nora de Izcue y Gianfranco Annichini, entre otros realizadores y realizadoras. Además de la práctica de producción, Anita se ha dedicado al montaje, porque le gusta mucho ver cómo surge la vida cuando una imagen se pega junto a otra.
En Arequipa, Anita es productora creativa de Triciclo, una serie documental musical de alrededor de treinta capítulos, filmados en locaciones insólitas y emblemáticas de la ciudad. En esta serie participa también como editora de buena parte de los episodios.
Gracias al cine y al audiovisual ha filmado en diversas regiones del Perú, como Ayacucho, Cusco, Lima, Tarma y Tacna. Recientemente, ha participado como segunda asistente de dirección y location manager en el exigente set de la película Fuga, de las directoras Mary Jiménez y Bénédicte Liénard, viviendo cuatro meses en la selva peruana.
Cuando no se dedica al audiovisual, Anita es diseñadora editorial y productora en el universo de la cultura y el espectáculo.